Estudiar a tope no debería costarte el sueño, la vida social y el poco ánimo que te queda.
Aquí ordenamos el caos para que la oposición no se te lleve por delante.
Soy psicólogo sanitario y, a lo largo de mi carrera, he acompañado a muchos opositores que estaban justo donde estás tú ahora: con la cabeza a mil, el cuerpo agotado y una presión constante que no te deja ni dormir. No necesitas que te diga que es duro; ya lo sabes. Lo que quizás no sabes es que esa ansiedad que arrastras no es inevitable. Se puede trabajar. Y sí, se puede estudiar sin vivir al límite.
Aquí no hay recetas mágicas ni discursos motivacionales de postal. Hay herramientas concretas para que entiendas lo que te pasa, por qué te estás bloqueando, por qué sientes que nunca es suficiente, y cómo desmontar todo eso sin dejar de prepararte. Mi trabajo no es decirte que pares (porque quizás no puedes), sino ayudarte a que esto no te rompa por dentro. Porque tu plaza importa, pero tú más.
45€/sesión
Cuando no es falta de ganas, sino exceso de presión. Te ayudo a entender qué te frena y a recuperar el foco sin que parezca una guerra contigo mismo.
Esa ansiedad que aparece solo con pensar en la fecha. Aquí trabajamos para bajarle el volumen a esa anticipación constante que te desgasta antes de tiempo.
Si descansar te hace sentir culpable, algo no va bien. Trabajamos para que el descanso no sea otro motivo de ansiedad, sino parte del proceso.
La autoexigencia no te está ayudando a mejorar, te está agotando. Aquí aprendemos a ponerle límites sin dejar de avanzar.
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No empezamos por darte consejos, sino por conocerte. En esta fase recogemos lo que te pasa, cómo lo vives y qué factores personales, laborales o relacionales están en juego.
Sin compromisos, sin presiones. Solo un espacio para empezar a desenredar lo que llevas dentro.